Seleccion de alfombras ikea

Las más importantes definen el sector de descanso del salón, las alargadas acostumbran ofrecer la bienvenida al lugar de vida y las redondas son ideales para espacios más chicos como un rincón de lectura o una región de juegos. En las texturas y los colores es donde entra en juego la personalidad de la vivienda (y su propietario) y materiales como la felpa o la piel de oveja como la del diseño SMIDIE tienen la posibilidad de lograr que el invierno en el hogar se viva de otra forma. Dan ganas de tirarse sobre ella y reposar una enorme siesta pero lo destacado es que es el complemento ideal para el suelo o para contemplar algún aparador o poner a los pies de la cama. 

El yute es otro material que está muy popular. Es una planta herbácea fibrosa con la que se crean alfombras muy duraderas y el modelo LOHALS es ideal tanto para una casa quinta como para un apartamento en el centro de la región. Al principio tiene un olor especial pero va desapareciendo gradualmente acorde se airea la vivienda y se pasa la aspiradora sobre la alfombra. Está utilizable en dos tamaños: 160x230 cm (69 euros) y 200x300 cm (99 euros). El modelo RAKLEV además es de yute y, aunque tiene un tamaño más reducido, tiene unas pinceladas discretas de color que la hacen muy original. Como sucede con la LOHALS, al ser un material natural, no hay dos iguales y como otros varios materiales con los que trabaja IKEA, el yute es reciclable. 

El deber de la marca sueca con el medio ámbito es tan fuerte que no solo posibilita el reciclado posterior, sino que ya varios de sus productos están fabricados con materiales reciclados. Es la situacion de las alfombras SPORUP, confeccionadas con botellas de PET de medio litro recicladas. Su precio va de los 47,99 euros de la chiquita a los 119 euros de la más importante y se encuentra dentro de las alfombras más espectaculares del muestreo de IKEA, debido a que se ve sorprendente que un plástico tan duro logre transformarse en un pelo corto y despacio. Una apuesta porque las cosas se tienen la posibilidad de llevar a cabo de otra forma y que revela que sí sirve de bastante reciclar.  Con la alfombra que se adivina seguro es con la STOENSE. Es un básico que queda bien la coloques donde la coloques y siempre contribuye calidez al espacio. Está utilizable en tres tamaños: 133x195 cm (49,99 euros), 170x240 cm (89 euros) y 200x300 cm (129 euros) pero, si la grande se quedara corta, sus bordes rectos aceptan juntar numerosas alfombras entre sí para hacer una más grande sin que se vean las uniones, creando un efecto moqueta. Queda bien en algún salón, igual que el modelo LILLEVORDE, para quien prefiera las rayas. Además, la relación calidad-precio es imbatible: tiene un tamaño de 133x195 cm y cuesta 39,99 euros. A la alfombra VINTER el color rojo le otorga un toque navideño pero de todos modos está pensada para todo el año. La cuadrado se ajusta a los lados de la cama y la redonda es impecable para algún rincón. Para no llevarse sustos, es sustancial entender que cuando se desembala y se desenrolla, tarda dos días en recobrar la forma original. Cuesta solo 19,99 euros y se puede escoger entre redonda o cuadrado (80x150 cm). Terminando, es sustancial acordarse que las alfombras no solo hacen agradable el interior de una vivienda. El modelo MORUM es muy efectivo en exteriores, debido a que resiste la lluvia, el sol, la nieve y la mugre. Está utilizable en dos tamaños: 160x230 cm (49,99 euros) y 200x300 cm (79 euros). Enormes, pequeñas, redondas, alargadas, de pelo extenso, corto, sostenibles... cada una es diferente a la otra pero alguno de ellas abrigará tu casa este invierno y, además, la va a hacer más acogedora.